“La Tesis fundamental de la teoría del Apego es que el estado de seguridad, ansiedad o temor de un niño esta determinado en gran medida por la accesibilidad y la capacidad de respuesta de su principal fig7ura de apego (persona con la que establece el vínculo.”
John Bowlby
Los seres humanos desde que nacemos necesitamos pertenecer a un núcleo, esa seguridad que necesita el bebe recién nacido de sentirse protegido y acogido, cuándo siente alguna desadaptación natural luego de haber estado en el vientre de su madre, demuestra la urgencia de protegerlos y de comenzar a incluirlos en la familia.
A medida que este bebe crece va siendo más demandante no sólo de los alimentos, ya Freud decía: “Durante esta etapa, el bebé se enfoca en la alimentación y la succión. Si el niño no recibe suficiente atención y afecto durante esta etapa, puede desarrollar problemas de confianza vs. desconfianza.”, en este sentido el contacto con la madre, la voz de los padres, las caricias físicas, son los indicadores, en esa etapa de sentirse parte de un ambiente cálido y confortable.
Por lo tanto, los vínculos en el grupo familiar, van a desarrollar el sentido de pertenencia en el niño y en el adolescente, de esta forma las relaciones familiares sanas y coherentes donde prima la adecuada comunicación, la tolerancia, la aceptación de las diferencias entre los miembros de la familia propiciará un aprendizaje socio emocional que lleve al niño o adolescente a replicar esas vivencias en sus nuevas relaciones.
Las demostraciones afectivas, además de los cuidados de alimentación, abrigo y salud, son importantes, esto es el abrazo, las caricias, hablarle con mensajes positivos: “eres importante, que la felicidad es tenerlo junto a nosotros», aparentemente no va a entender, pero el tono y la cercanía con el niño va forjando su seguridad, de lo contrario aparece la inestabilidad, o la necesidad imperante de ser queridos o aceptados, provocando así posiblemente relaciones de pareja dependientes, o demandantes.
En el proceso del desarrollo evolutivo del niño y adolescente le va ir dando importancia a pertenecer a grupos a identificarse con las costumbres y normas, de esta manera aprenderá por ejemplo el respeto por los demás, que le corresponde hacer en cada uno de los grupos a que pertenezca, la valoración de sus propios actos y de los actos de los demás, principalmente si está aceptado en su grupo y lo percibe como tal, minimizará la posibilidad de ingresar a grupos negativos para el.
Riesgos de no desarrollar el sentido de pertenencia:
- La inseguridad que puede presentarse en muchos sistemas relacionales, por ejemplo, en la pareja, uno de los miembros presenta un miedo permanente a ser abandonado y desarrolla un ambiente de celos, sin razón aparente.
- La Complacencia absoluta, es también una consecuencia de “no me dejes… yo hago todo lo que tu desees”, (tengo miedo a estar solo).
- Autoestima deteriorada, “Me siento tan poca cosa, que no merezco ser querida”
- Pandillaje, está probado en varias investigaciones, un gran porcentaje de miembros de una pandilla, buscan “pertenecer”, pues nunca fueron parte de un grupo dónde se sintieran que formaban parte, familias disfuncionales, familias ausentes de apego afectivo, familias negligentes.
- Fármaco dependencia, las adicciones en muchos casos son consecuencia de buscar satisfacción en la droga o el alcohol por una ausencia de apego en las relaciones familiares o en las relaciones sociales.
Licenciada Maritza Dìaz Casapìa
Psicóloga
C.Ps.P.0425